No sé por qué aún hoy día recuerdo la casa de mi tía Manuela y su patio. Es una casa pequeña para ser de comienzo del siglo 20 (Quizás podría ser de final del 19); con suelo de ladrillo, un lavadero de piedra típico de las casas antiguas de mi ciudad y un patio casi grande, aunque la verdad es que he visto patios más grandes que este. Con un palo de Mango (Arbol de Mango) y al fondo una vieja Porqueriza que se usa para guardar cosas o sentarse a recibir el viento. Aunque la casa es en sí grande, para ser de esa época se queda algo pequeña. Allí pasé parte de mi niñez, vi los cambios que tuvo el patio, desde que estaba el gallinero bajo techo, desde que estaban los marranos y un palo de Carambolas y Pepas (Grosellas rojas). Me pasé buen tiempo jugando solo en el patio de niño cogiendo caracoles pequeños o columpiándome en un improvisado columpio.
Debe haber algo en esa casa que aún hace que hoy día tenga sueños raros de esa vivienda, como esos sueños en los que estoy dentro y todo es una atmósfera oscura, o sueño que paso frente a esa casa y ya no hay nadie a quien visitar, que la única que queda ahí es mi prima y su hijo, o que estos se han ido de ahí y ya se han vuelto desconocidos para mí. Incluso a veces sueño que aunque parece vacía la casa hay mucha gente joven y que el patio ya no existe, que han construido habitaciones nuevas de ladrillo.
De niño tuve un sueño que aún recuerdo de esa casa; estábamos en la sala y mi tía me traía unas chanclas que al ponerme empezaba a volar por toda la sala, ella también lo hacía y la atmósfera era oscura, sé que era ella, pero la veía casi como una silueta oscura. No sé qué significaba este sueño, pero ese era.
Se siente mucha soledad en la casa y se quedó muy grande para mi prima y su hijo. Cuando estuve ahí en el año 2007, además de esa soledad, había un vacío enorme. Solo es un recuerdo cuando de niño iba a ver a mi tía Manuela, cuando de joven me pasaba horas charlando con mi tío Enoc, cuando mi Papito (Abuelo) se sentaba a leer el periódico en la sala. Miles de historias puedo contar de mi niñez y juventud ahí en la casa, pero hubo una muy extraña que entendí con los años. Me encontraba con mi prima Vicky en el patio, jugando dentro de la antigua Porqueriza, hasta que llegó un niño unos años mayor que nosotros, yo tendría unos 5 o 6 años. Este nuevo personaje empezó a molestarnos mucho y a empujarnos, no recuerdo qué decía, la cosa es que incordiaba demasiado. Sacó una navaja pequeña y amenazó a mi prima, ella gritó llamando a su mamá y yo a mi tía. Solo acudió la mamá de ese niño intentando calmar la situación, pero una vez con nosotros, cogió del pelo a mi prima y la zarandeó de un lado a otro acusándonos de no sé qué cosa mientras el niño me pateó y en el suelo quedé llorando. Sentí mucho miedo cuando ella agarró la navaja y se avalanzó hacia mí, pero bruscamente se detuvo mirando a mi espalda (Alguien podría decirme por qué siempre aparecen detrás de uno?) Levantó su mirada mirando hacia la esquina, su rostro tenía expresión de miedo, el niño gritó de miedo y retrocedieron varios pasos saliendo del interior de la Porqueriza. Al dirigir mi mirada hacia donde esa mujer miraba boquiabierta, vi una mujer de vestido oscuro levitar en una esquina, casi tocaba el techo. Su cara era la de mi tía manuela, pero más joven. Su mirada daba miedo, estaba seria fulminando a la mujer. Mi prima y yo salimos de ahí y lloramos de miedo. La mujer empezó a gritar cosas; Dios mío, virgen santa, señor de los milagros y cosas que no recuerdo. El niño se orinó encima y oculto detrás de su mamá gritaba llorando. La mujer que levitaba descendió poco a poco, el escándalo hizo que todos llegaran al patio; Estaba mi primo Fidel, mis primas Amparo, Esperanza y Esmeralda, la mamá de Vicky. Mi tía Manuela detrás de ellos, se preguntaban qué pasaba, pero la mujer que nos agredió gritaba de horror. Caminó huyendo de ahí, pero la que levitaba ya no me daba miedo, me sentía bien con ella, como si nos protegiera. Salió de la Porqueriza caminando, pero sus pies no tocaban el suelo, su semblante serio y de mirada profunda solo iba dirigido a esa mujer que nos había atacado.
-Ella, ella- Gritaba la mujer, pero nadie más la lograba ver.
Preguntaban cual mujer y aunque Vicky señalara el lugar donde se encontraba no veían nada de nada. No recuerdo quien la entró al interior de la casa, ella miraba a la mujer que levitaba y lloraba histéricamente. Cuando yo los seguí vi un hombre joven en el lugar donde estaba el gallinero, nunca había visto a ese hombre, aunque tenía un parecido a mi primo Fidel. Ya en el interior de casa la mujer empezó a manotear en el suelo y a gritar a los santos que la protegieran, gritaba perdón, gritaba no, gritaba que la dejaran en paz. Arrinconada en una esquina manoteaba cerrando los ojos. La mujer que levitaba estaba cerca de ella, no me di cuenta cuando llegó ahí ni por qué nadie lograba verla casi tocando el techo. De la habitación de mi tío Enoc un hombre, casi oculto, la miraba. Era el mismo hombre que vi antes de entrar.
Eso fue lo que sucedió, al preguntar en aquel tiempo qué le había pasado a esa señora me decían que se había vuelto loca. Nunca más la volví a ver. Pero con el paso de los años mi tío Enoc me contó que ese día ella salió como loca de la casa, que a las semanas se cambió de casa a otro barrio, que nunca volvió por esos lados y no hablaba de ello. Contaba que Esmeralda decía que Vicky había visto una mujer que volaba ese día, pero no le creían, yo le conté que también vi a esa mujer después que esa señora nos pegara. Mi tío se sorprendió y empezó a preguntarme cómo era, cómo estaba vestida, etc.
Pasaron unos años, quizás era adolescente, supe que esa mujer, la que nos atacó, quería matarnos y destruir a la familia por celos y envidia, creo que mi prima era novia de un hombre del que esa mujer estaba enamorada o Fidel era el novio de una muchacha y esta mujer quería ser la novia de mi primo, pero él no le hacía caso. Por celos quería hacerles daño a ellos y al ser nosotros, Vicky y yo, de la familia, quiso hacernos daño. También había algo de envidia.
Tenía yo unos 26 años o menos cuando entré a la habitación de mi tío y vi una foto de una mujer, de la mujer que vi ese día levitando. Era una foto pequeña colgada en la pared sobre el cabezal de la cama, una cama pequeña de inicios del siglo 20. Por un momento creí que era mi tía Manuela de joven, al preguntar a mi tío quien era me sorprendió cuando no contestó lo que deseaba oír. Dijo que era su mamita (Abuela), que era la mamá de su mamá, si mi tío era el hermano de mi abuelo, entonces ella era mi tatarabuela.
Años después, en una de mis visitas a la casa, vi varios álbumes de fotos sobre la mesa del comedor. Al curiosear vi la foto de un hombre joven muy parecido al hombre que vi ese día en el patio. Le pregunté a Esperanza y ella a su vez a mi tía, su mamá. Me dijo que era de un hermano que había muerto atropellado de joven, tendría unos 18 años cuando eso, que era muy unido a mi tío.
Aquellos seres que vimos Vicky y yo eran familia nuestra? Nos protegían? Me pregunté esto más de una vez, pero entonces donde está aquello de que al morir nos vamos a un lugar? Infierno o paraíso. Acaso es mentira? Acaso nos quedamos aquí para siempre?
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