Esta es una historia totalmente verdadera, quizás muchos no la crean pero no es lo importante, lo primordial es leerla y que saquemos nuestras propias conclusiones.

La historia inicia en un club, donde algunas amigas tratan de pasar una noche divertida y disfrutar de la vida, al pasar el tiempo, una de las chicas le dice a la otra “Discúlpame, pero estoy un poco tomada, me iré a mi casa”. La otra chica acepto, se despidieron y cada una tomo su rumbo.

Llega la joven a su casa muy pasada de tragos, entra a la cocina para buscar algo de comer y se percata de que sus padres no se encuentran, así mismo su hermana menor se había quedado dormir en una pijamada. ¡Por fin, libertad en casa! Grita la chica, se prepara algunos emparedados y se dirige a su cuarto para ver un poco de televisión, pasan algunas horas y llegan sus padres con cara de preocupación, la miran directamente a los ojos, pero la joven se desmaya y cae desplomada en el piso.

Mientras dormía, sintió algunos golpes y la voz de su hermana que le decía “Levántate dormilona, es hora del desayuno” asintió con la cabeza y pasados unos 15 minutos se levanto de la cama y se dirigió al baño. Allí se encontró con su hermana tirada en el piso, así que corrió y puso la cabeza en su regazo, instantáneamente su hermana menor que seguía en el piso le pregunto ¿Me amas? Si hermana, ¿Sabes que siempre podrás contar conmigo? Si, lo sé. Pues no te preocupes por mí, siempre estarás en mi corazón.

La joven dejo a su hermana en el piso y corrió abajo para llamar a sus padres, y les pregunto ¿Qué le pasa a mi hermana? Me la encontré tirada en el piso. Sus padres se miraron a los ojos y le dijeron ¡Tu hermana murió ayer!.