Es una historia muy, muy pequeña pero es interesante.
Como parte de las nuevas actividades que se implementaban fue la creación de recorridos nocturnos tanto a una presa de mediano tamaño (que sinceramente me da miedo pasar, pero es necesario para ir a Querétaro), un cerro llamado el Astillero y el último el acueducto del Saucillo, Arcos los cuales son los más altos en su tipo en Latinoamérica miden 45 metros de alto y es un lugar muy agradable para ir acompañado.
Para ponerlos en contexto estos Arcos, como se conocen en mi ciudad, tienen una historia, se dice que durante su construcción en el siglo XVIII la obra tuvo muchísimos problemas, cada vez que iban a la mitad se destruían sin causa aparente y esto ocurrió varias ocasiones.
Se cuenta que el demonio era quién destruía el acueducto, el arquitecto, desesperado, se puso en ”contacto” con él.
El demonio le requería 14 almas de niños que debían ser enterrados vivos en los cimientos de cada arco, el arquitecto accedió y por fin se pudo culminar la obra.
La historia que les quiero relatar se basa en justamente esto.
En uno de los recorridos que se hacían por aquí de noche la gente quedó encantada, al finalizar el recorrido mucha gente foránea agradeció al guía y le dijo que estaba muy bien montado que los niños le habían dado un ”excelente toque”, el guía, perplejo, le dijo ¿Qué niños?
Los niños, de blanco que estaban en la base de los arcos mientras nos relatabas la historia.
El guía no dijo nada, pero dejo el recorrido poco tiempo después.
Cuando nos contó nos dijo que en anteriores ocasiones gente hablaba de los famosos niños, pero entre ellos, no lo habían comentado antes. La iluminación que se usa en los recorridos es de antorchas, no hay iluminación profesional, ahora ya nadie usa estos arcos para tránsito (que era su principal uso), están en desuso. Sólo funciona como un parque para hacer ecoturismo pero sólo en fin de semana, cualquier día se puede acceder a ellos y para bajar se sigue un sendero muy escarpado y esta solitario, hay algunos graffitis en piedras, pseudo símbolos satánicos pero nada más, historias hay muchas.
En mi pueblo hay muchos lugares, desde el Astillero con supuestos descensos de OVNIS, éste acueducto, la iglesia hundida o hasta el cerro de las Brujas.
Interesante es, me gustaría relatar más historias de mi pueblo es un lugar hermoso que contrasta con tantas leyendas que aumentan el interés en nosotros, sus habitantes.